Esta relajación nos sirve para cuando andamos sin tiempo y la podemos hacer en cualquier lugar donde estemos. Nuevamente nos apoyamos en el poder de la imaginación para crear nuestra realidad.
Imagine su cuarto preferido. Vea con detalle como se entra al cuarto, la puerta, las ventanas y el relajante paisaje que puede ver desde adentro. Coloque objetos en el cuarto que le sean agradables. Decore su cuarto con texturas y colores que le inviten a relajarse. En el centro del cuarto coloque su silla favorita. Visualice en el área central del cielo raso de su cuarto un espacio por donde entra una luz celestial que ilumina la silla donde Ud. viene a sentarse.
Siéntese en la silla y véase bañado por la luz. Sienta que Ud. absorbe la energía de la luz y que sus pies se relajan, sus piernas se relajan, su espalda y cuello se relajan. Imagine que la luz penetra su cuerpo de la cabeza hacia abajo. Mientras la luz desciende por su cuerpo va recogiendo impurezas que van a salir por sus pies. Vea la impureza salir por sus pies y sienta que la tierra absorbe esas impurezas.
Haga esto por dos minutos cuando sienta la necesidad de soltar estrés.
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